Carta abierta a Ricardo Lagos Escobar

Sr. Presidente,

Hace algunas semanas, soñé con Ud. Estábamos en la inauguración de una estación de metro y cuando Ud. se acercaba a saludarme, yo le decía enérgicamente "¡Ricardo Lagos, por favor termina pronto tu gobierno y retírate!" obviamente su cara se desfiguraba mientras veía como su séquito me miraba con espanto poniendo caras de "¡¿Cómo esta niñita le dijo eso a Su Excelencia?!" Y bueno, yo también desperté sobresaltada... después de todo, voté dos veces por Ud.

En fin, cuando le conté el sueño a mi compañero y a mis colegas del trabajo, sólo logré hacerlos reir a carcajadas y mirarme con cierta extrañeza, así que decidí no darle mayor importancia... hasta que lo ví y escuché gritando en Valdivia, mi ciudad natal.

¿Cómo es posible, señor Presidente de todos los chilenos, que Ud. sea tan prepotente con sus ciudadanos? ¿Cómo es posible, señor Presidente, que Ud. haya olvidado que fue elegido por la mayoría del país -el pueblo, la gente, la ciudadanía- y que por tanto Ud. es EL PRIMER SERVIDOR PÚBLICO y no el Princeps Civitatis? ¿Cómo es posible Sr. Presidente, que Usted, un hombre que luchó por el derecho de todos a expresarse, un hombre que increpó a Pinochet por televisión, no permita que otro -UN CIUDADANO- se exprese LIBREMENTE con respecto a su gestión? ¿O acaso Ud. no cree en la libertad de expresión y en la crítica legítima? ¿O acaso todos tenemos que estar de acuerdo con Ud.?

No puedo creer que Ud. el hombre por el cual voté dos veces, haya potenciado a tal nivel su arrogancia en estos años de poder. Y es verdad, cuando voté por Ud. sabía de su carácter, pero esto en verdad, me da vergüenza... hace un rato venía manejando y escuchando la radio, cuando me entero que en la Cena Anual de la SOFOFA un microempresario le espetó una crítica y su guardia inmediatamente actuó, disuadiendo cualquier nuevo uso de la palabra, mientras Ud. ironizaba despectivamente sobre aquel anónimo sujeto frente a los medios de comunicación.

De verdad, ahora pienso recordando mi sueño, que mi inconsciente fue visionario: Aunque Ud. sea el presidente más popular que ha tenido este país, aunque Ud. sea el presidente más inteligente y más preparado para el cargo en nuestra historia, aunque Ud. sea un estadista admirado y reconocido internacionalmente, aunque todo eso y más... lo único que quiero es que llegue el 11 de marzo. Su arrogancia y su prepotencia me han cansado.

Esperando que mis palabras sean leídas por Ud. y que de alguna manera le hagan reflexionar,

Le saluda atentamente,


Loreto Navarrete Carrasco
Ciudadana