Muy orgullosa. Significó no tener vacaciones en febrero, pero... creo que valió la pena.
viernes, 9 de abril de 2010
Acá está mi último hijo...
Mientras Pánico toca en el Cienfuegos y yo trabajo...
Download now or listen on posterous
martes, 6 de abril de 2010
Bonding
¿Qué fenómeno más complejo que la construcción de vínculos entre seres humanos? No nos damos ni cuenta, y de pronto, construimos estos hilitos invisibles con personas que hasta hace muy poco, ni por si acaso eran parte de nuestras vidas. ¿Qué hace que nos conectemos? No lo sé realmente. Muchos podrán decir que son los gustos afines, las biografías similares, situaciones que se viven en común... y puede ser... pero conozco demasiada gente con la que comparto cosas, y no por ello aparecen esos hilitos invisibles.
Podría ser el destino. Me gusta esa respuesta. Simple y un poco inapelable. Es porque tenía que ser. (Muss es sein? Es muss sein!) Pero más bien son nuestras decisiones. ¿Sobre la base de qué? ¿intuiciones? ¿Química? ¿Circunstancias? Me pregunto esto mientras me auto-observo en estos días en pleno proceso de bonding, por una parte, tejiendo hilitos de afecto, y por otra, en pleno proceso de un-bonding o decoupling, que -debo decir- es muchísimo más complejo que lo primero.
Bueno, en medio de estas extrañas reflexiones... algo crípticas... mejor... escuchar un buen tema.
viernes, 26 de marzo de 2010
Growing Up
Me acerco a una de las semanas más decisivas del año. La primera semana de Abril. Para muchos, entre Navidad y Año Nuevo es el momento del balance anual, de lo hecho y lo deshecho, de la raya para la suma como diría Paulsen. Para mí es la primera semana de abril, cuando se viene el aniversario de mi nacimiento.
Da la casualidad que este año dejo oficialmente de ser "joven" desde la perspectiva de la política pública chilena (no la internacional, de ONU que alarga la juventud hasta los 32 -menos mal-). Aún así es un poco abrumador esto de cambiar de folio. Pareciera que a estas alturas de mi vida tengo más preguntas que respuestas (a diferencia de los 20's en que parecía y parecíamos saber todo). Como conversábamos ayer con el comité organizador de mi cumpleaños (si, este año se autoconvocó una comisión organizadora para mi sorpresa), da la sensación que viví los treinta desde el 2000 al 2009, y que estoy viviendo los veinte desde este 2010: sin ninguna claridad de hacia dónde se dirige el barco.
Pero no soy sólo yo. MIro a mi alrededor por un segundo y al menos no estoy sola en el mar de incertidumbres. En verdad lo está todo el país. También todos mis amigos y amigas, un poco sin saber qué hacer, un poco sin tener referentes.
Quisiera pensar que esta nueva década de mi vida será la década del tiempo productivo, no sólo laboral. Quiero pensar que en estos diez años que parten el domingo 4, seguiré trabajando con fuerza en todos los temas que me apasionan, pero que me daré el tiempo para escribir más, tomar más fotografías, descorchar más botellas de vino con mi familia y mis amigos, y sin duda, viajar mucho más. Me propongo tomarme los treinta como no me tomé los veinte. Con más calma, con más disfrute, con una pizca de irresponsabilidad veinteañeril.
domingo, 13 de diciembre de 2009
De viajes y elecciones
Contenta y honrada de conocer el mundo uruguayo, su gente, sus mates, su disposición ante la vida, su conversación amable y franca. Y por supuesto que estoy contenta que haya ganado Pepe, que uruguayas y uruguayos hayan ido a celebrar en la entrada de la ciudadela, con tanto entusiasmo y mística.
Por eso cuando son casi las dos de la madrugada del 13 de diciembre, quiero y no quiero pensar en la elección chilena. Mañana tendré que ir a votar, en el centro, en el Liceo Cervantes de calle Amunátegui, y lamento muchísimo decir que -como muchos y muchas- voy sin entusiasmo, voy resignadamente, voy porque es parte de mis derechos y deberes de ciudadana. Hará calor y estaré en la mañana con muchísimas otras mujeres en este liceo, esperando para hacer una marca en un papel que no hará mayor diferencia en el país. No producirá cambio alguno en la clase política. Añoro volver a sentir esa mística que sentí antes. Me apena haberme vuelto tan escéptica, y me molesta que este cinismo es producto de la vida social y política de los últimos 30 años.
Por cierto que será interesante de analizar todo lo que pase mañana. Mi lado racional se hará cargo y disfrutará el rol de observador. Pero claro, esa sensación de protagonismo, de sueño compartido, de visión, de historia y futuro... esperemos que ocurra en alguna al menos de las elecciones de las próximas décadas. Ahora, mejor volvamos a Jaime Roos... y luego a dormir para ir temprano a votar.